domingo, 16 de octubre de 2016

Día de

Hoy es mi segundo día de la madre como mamá de Julia. Este tiene un matiz diferente que el primero, en el que todo era tan nuevo, confuso, intenso (justísima palabra que me regaló mi amigamadre Natalia Rubinstein). Tan puerpérico.
Por supuesto que la intensidad sigue; cómo no va a ser intenso compartir cada día con este bicho bolita que se pasea por toda la casa, que sonríe cuando le ofrezco una galletita de arroz, que suspira cuando amanece y ve al gato, que señala con vehemencia las cosas que quiere, que aplaude cuando logra subirse al autito, que me mira tan profundamente a los ojos mientras toma la teta, con tal inspiración, y de pronto la suelta y me dice "babababa", sonríe y sigue. En fin, podría ser eterna esta lista de pequeñas maravillas que son Julia. Agradezco al universo por Julia, por sus ojos que se parecen a los míos y también a los de su papá, por su sonrisa desmesurada, por esa natural inclinación que ya tiene a ser un amor de persona.
Ser mamá -lo hablaba ayer en terapia- no me define. Julia, por suerte, no está en este planeta para completarme ni para llenar un vacío. Ella es ella; y me regocija su existencia, y la posibilidad de tenerla cerca, porque nunca jamás amé tanto a nadie en el mundo. Ser mamá no me define, pero me hace mejor persona, seguro, y además me hace muy feliz.
<3
Feliz día a todes