Te movés y sonrío. Qué sonrío: se me escapa la sonrisa como un cuis.
Es tan nuevo. Tan hermoso y extraño.
Anoche soñé con un niño. En una librería. No sé si eras vos, pero cuidar a ese niño y mostrarle los libros me hacía cosquillas exactamente en el mismo lugar que tus pataditas. Hondo. Nuevo y raro.
Mirá, esta canción, qué hermosa. Me hace llorar, como casi todo. Es para vos.
Escuchala. Más tarde te la canto. Más adelante la cantamos juntas.
Mamá sabe bien
Perdí una batalla
Quiero regresar
Sólo a besarla
No está mal
Ser mi dueño otra vez
Ni temer que el río sangre y calme
Al contarle mis plegarias
Tarda en llegar
Y al final, al final
Hay recompensa
Mamá sabe bien
Pequeña princesa
Cuando regresé
Todo quemaba
No esta mal
Sumergirme otra vez
Ni temer que el río sangre y calme
Sé bucear en silencio
Tarda en llegar
Y al final, al final
Hay recompensa
En la zona de promesas
Ser mi dueño otra vez
Ni temer que el río sangre y calme
Al contarle mis plegarias
Tarda en llegar
Y al final, al final
Hay recompensa
Mamá sabe bien
Pequeña princesa
Cuando regresé
Todo quemaba
No esta mal
Sumergirme otra vez
Ni temer que el río sangre y calme
Sé bucear en silencio
Tarda en llegar
Y al final, al final
Hay recompensa
En la zona de promesas